sábado, 29 de marzo de 2014

"Cariño, estoy enojado, estoy sufriendo"....♥



Decir «Cariño, te quiero» es bueno, es importante. Es natural que compartamos nuestra alegría y nuestros buenos sentimientos con el ser amado. Pero cuando sufres, cuando estás enojado con esa persona, también debes decírselo. Has de expresar lo que sientes, tienes todo el derecho, ya que esto es el verdadero amor. Intenta hacer todo lo posible para decirle con serenidad: «Cariño, estoy enojado contigo. Estoy sufriendo». Quizá haya un tono de tristeza en tu voz; pero está bien, lo importante es no decir algo para castigar o culpar a la otra persona. Cuando dices: «Cariño, estoy enojado. Estoy sufriendo y necesito que lo sepas», es el lenguaje del amor, porque habéis prometido apoyarse mutuamente como pareja, como marido y mujer. El padre y el hijo, la madre y la hija, también son una pareja; o sea que aunque sea tu hijo o tu padre, debes expresar lo que piensas. Si estás sufriendo tienes el deber de decírselo; y cuando seas feliz, comparte también tu felicidad con él o con ella. Cuando sufras, cuenta a tu ser amado que estás sufriendo. Aunque creas que él ha causado tu ira, debes mantener la promesa que le hiciste. La única condición, es decírselo con serenidad y de una manera afectuosa. Hazlo lo antes posible, sin ocultar más de veinticuatro horas la ira o el sufrimiento, que sientes.

De lo contrario, esta carga será demasiado pesada para ti y te emponzoñará por dentro. No decírselo, demostrará que no la amas lo suficiente y confías poco en la otra persona. Así que, has de contarle el sufrimiento y la ira que sientes, lo más pronto que puedas. Veinticuatro horas es el plazo máximo de tiempo que puedes esperar para hacerlo. Quizá sientas que no puedes decírselo enseguida porque aún estás demasiado alterado, demasiado enojado. En ése caso, practica la respiración consciente y sal a pasear. Y cuando te hayas tranquilizado y te sientas preparado para compartir tu dolor, díselo. Pero si el plazo de tiempo está a punto de terminar y aún no te has calmado, escribe lo que sientes. Redacta una «nota de paz», un mensaje de paz. Mándale la carta y asegúrate de que la reciba antes de que hayan transcurrido veinticuatro horas. Es algo muy importante. Los dos se han comprometido a actuar de éste modo cuando se enojen. De lo contrario, no estarán respetando los términos de su tratado de paz.

Thich Nhat Hanh

No hay comentarios:

Publicar un comentario